Nuevas visiones sobre el cáncer de mama
Hablar de cáncer de mama en 2021 reúne muchas discusiones y necesidades que las mujeres comienzan a decir en voz alta. Al ser la primera causa de muerte en las mujeres mexicanas, existen un gran número de conversaciones que van desde la normalización de los cuerpos y una representación real, sin frutas ni metáforas; hasta la desromantización de una enfermedad que no es color de rosa.
Una representación real
Existen contenidos que están mostrando la diversidad de senos para promover sobre el desuso de metáforas en la representación de los pechos, ya que no dejan claro lo importante que es que las mujeres toquen sus senos, los conozcan y los observen a través de la normalización de su apariencia.
Chichis reales, no frutas, no pelotas. Los contenidos y los medios deben empezar a cuestionarse cómo mostrar los senos sin censura ni sexualización. Y estamos hablando de todos los senos en sus diferentes tamaños, formas, colores y hasta quienes no los tienen o los perdieron debido al cáncer de mama.
El cáncer de mama no es una enfermedad color de rosa
La empatía con la que se aborda el cáncer de mama debe ser esencial, sobre todo para quienes están en este proceso o quienes sobrevivieron a él. La petición de entender que no es una enfermedad color de rosa, que no es bueno romantizar «la batalla que están peleando».
Sensibilizar a todas las mujeres sobre este tema también conlleva a exigirle a un gobierno más investigación, medicamentos y sustento para que las mujeres dejen de morir.
En palabras de Karla Barajas, quien se denómina «Activista uniteta y sobreviviente del cáncer de mama» las mujeres no necesitan que la gente se ponga un moño rosa o que la selección mexicana use playeras rosas, necesitan apoyo real del gobierno, alentar a las mujeres a checarse y exigir medicamentos y tratamientos accesibles para todas las mujeres.
Autoexploración y detención temprana
Muchas mujeres no se exploran, porque no saben como hacerlo, lo hacen mal o simplemente porque les da pánico pensar solo en la idea de ser diagnosticadas.
Sumando además que el contenido de cómo explorarte de manera clara y sin estereotipos, es poco. Un ejemplo de cómo se busca contrarrestar este fenómeno es este video de Malvesitida, donde se explica a detalle como hacerse una autoexploración, con cuerpos y mujeres reales de diferentes edades y qué síntomas tomar en cuenta para ir con una ginecóloga.
Además, se promueve que si las mujeres no se sienten seguras, busquen la opción a la que se tenga acceso para una asesoría médica. De hecho, muchas mujeres en México no tienen acceso a servicios ginecológicos, por lo que es aún más complicado tener una autoexploración y detención temprana, volviendo necesario exigir un acceso justo para todas.
Pareciera que la cultura de la prevención en México siempre había estado hablando desde inculcar miedo pero no desde la acción. Es muy importante tener en mente que a cualquier mujer en algún punto de su vida, puede darle cáncer de mama, pero si es detectado con anticipación, se pueden salvar muchas vidas si deja de abordarse desde el miedo y se promueve la prevención consciente.
Atravesamos un momento en el que se está desromantizando el cáncer de mama a través de contenidos que ofrecen una representación más realista y sin metáforas, para disminuir el miedo y fomentar la autoexploración en mujeres y hombres.
